La Navidad es la mejor época del año para compartir en familia. Sin embargo, para los que ya las han pasado junto a ellos durante muchos años a veces les apetece cambiar un poco los planes, ya sea por monotonía o, simplemente, porque quieren pasarlo mejor y hacer de estas fiestas el momento más bonito del año.
1. Juegos de mesa
Puede que no tengáis el presupuesto suficiente como para hacer un plan extremadamente original o caro. No obstante, esto no significa que no podáis pasarlo bien igualmente, para eso son los juegos de mesa. Si no soléis practicar juegos de mesa durante las fiestas de Navidad o en familia puede ser muy divertido ver cómo avanza la velada y cómo es jugar con aquellas personas que creías conocer tan bien.
Como participaréis personas de edades muy diversas, lo mejor es que busquéis un juego que sea divertido y comprensible para todos, como el Monopoli, el Uno o un juego de naipes. Otros juegos como el Trivial o el Scrabble sólo serán convenientes si todos los que jugamos somos adultos, puesto que sería mucho más difícil para un niño participar y disfrutar de ellos.
2. Visita a un mercado navideño
Las vacaciones en Navidad no tienen porqué ser solamente de ámbito romántico. También podemos planear una divertida escapada en familia a lugares donde se celebren los famosos mercadillos navideños. Depende del presupuesto con el que contemos podemos viajar al extranjero o bien visitar un mercado de otra ciudad de nuestro país. Si vivimos en una capital que ya tiene mercado y no contamos con mucho dinero o nuestra familia es muy grande, podemos planear una tarde de invierno visitando el mercadillo, para ir posteriormente a patinar sobre hielo o a comer una taza de chocolate caliente con porras.
3. La nochebuena en un restaurante
Si estamos cansados de la cena de nochebuena en la misma casa o no queremos que nuestra madre o nosotros mismos tengamos que prepararlo y limpiarlo todo en esta noche de festivo, tenemos la opción de reservar mesa en un restaurante y celebrar la misma cena con un toque diferente.
Existen restaurantes de todos los precios, por lo que deberíamos pensar bien dónde queremos ir, qué tipo de comida nos apetece y cuál es nuestro presupuesto. Además deberemos tener en cuenta que les tiene que gustar a todos, puesto que debe ser un momento de alegría y felicidad en familia.
4. Un viaje a un lugar exótico
Aquellos con más ganas de gastarse un dinero extra durante estas navidades un viaje en familia al extranjero podría ser una gran idea. Podemos escoger un lugar exótico en el cual, por ejemplo, no se celebre la Navidad para tener así unas fiestas completamente diferentes. Puede ser que disfrutéis enormemente de la normalidad de un día tan señalado para nosotros y de la comida y el modo de vida de la otra punta del mundo. Para este plan no es necesario solamente no tener dinero disponible para el viaje y otros gastos, sino que también deberemos tener en cuenta que no faltemos a ningún compromiso familiar o hiramos la sensibilidad de cualquier otro miembro de la familia.
5. Una Navidad tradicional
Para aquellas familias más amantes de la Navidad lo mejor que pueden hacer es, después de comer, disfrutar de una sobremesa llena de música con zambombas cantando villancicos rodeando el árbol, comiendo polvorones y los niños recitando el verso. Quizás esta sea la típica Navidad para muchos, pero todavía la disfruten enormemente. Otras familias puede que no tengan esta tradición como suya y se sorprenderán enormemente de ver que realmente disfrutan de esta celebración tan típica. Lo importante es que se diviertan y se rían en este momento tan bonito del año en el cual se encuentran casi todos o todos reunidos en la misma mesa.