Ingredientes para 6 personas
- Un pavo de unos cinco kilos
- Medio kilo de carne picada de cerdo
- 200 gramos de bacon en tiras
- Una cebolla
- Un pimiento verde
- Un pimiento rojo
- Sal
- Pimienta
Receta completa
En una receta se incluyen tanto vegetales, en el relleno o la guarnición; como proteínas, de la carne; e incluso fécula, porque a veces se acompaña de puré de patata. Resulta un plato de lo más completo y del que, además, quedarán restos para el día siguiente a buen seguro.
Sin embargo no todo es positivo en esta receta y el peor de sus aspectos es la cantidad de tiempo que se necesita en la cocina para hacerlo. Calcularle más de tres horas, o lo que viene siendo toda la tarde. La mayor parte del tiempo el ave estará cocinándose en el horno, pero eso no quita para que de vez en cuando tengamos que pasarnos por la cocina para ver cómo va.
Los pavos elegidos para una celebración como Navidad suelen ser de gran tamaño, para que haya suficientes raciones para todos los comensales y también porque cuanto más grande sea el ave más relleno podremos meter dentro. La carne está muy rica, pero la verdadera gracia de este plato está en el relleno.
Normalmente los pavos que se usan para rellenar no pesan menos de 3,5 kilos y suele estar en torno a los cinco kilos, aunque algunos pueden alcanzar los 10 kilos. A la hora de decantaros por un pavo más o menos grande tener en cuenta que tenéis que cocinarlo en el horno y no en todos va a entrar un pavo que pese 10 kilos. Si le decimos al carnicero que vamos a rellenar el pavo a buen seguro que nos lo deja preparado para ello y que no tengamos necesidad de ponernos a limpiarlo al llegar a casa.
El relleno
El relleno es lo más importante de esta receta y precisamente por eso es de lo más variado. En cada casa se hace de una manera diferente, con unos u otros ingredientes, lo que da pie a que si nos falta uno podemos sustituirlo por otro. La propuesta que os hacemos es de un relleno de carne, uno de los clásicos en nuestro país.
Lo primero es freír el bacon y después añadir a la sartén la cebolla y el ajo hasta que estén pochados. Inmediatamente añadir el pimiento y la carne y salpimentar. El relleno se reserva. Si tenemos niños en casa podemos pedirles que luego ayuden a rellenarlo, porque seguro que se divierten.
El pavo precisa de dos cabezas de ajos que pelaremos y machacaremos, pero no picaremos, así como aceite de oliva, hierbas aromáticas al gusto del cocinero y mantequilla para ir inyectando al pavo y que no se seque.
Prepara el pavo con antelación
Lo ideal es preparar el pavo con un día de antelación a la cena de Navidad. En un recipiente lo más hermético posible dejaremos el ave junto a los ajos, las hierbas y el aceite para que se vaya empapando de esos sabores. Lo dejamos marinar en la nevera durante 24 horas y damos vuelta cada cierto tiempo a fin de que se empape por igual por todas las partes.
Una vez que vamos a meterlo al horno lo ponemos a precalentar a 180º y mientras tanto rellenamos el pavo presionando a fin de que entre la mayor cantidad de preparado de carne posible y resulte sabroso a la hora de degustarlo. La mejor forma de hacerlo es con las manos, así que poneros unos guantes limpios y rellenar con los dedos.
Antes de meter al horno hay que derretir la mantequilla e ir inyectándola al pavo por diversas partes, de modo que quede repartida y la carne no quede al final seca. Una vez en el horno repetiremos este proceso varias veces.
El pavo va a estar en el horno un mínimo de dos horas y media y a buen seguro que alcanzará las tres. Es por eso que para evitar que se queme por la parte de arriba lo hay que envolver en papel de plata antes de meter al horno. Una vez está listo se coloca en una bandeja y se lleva a la mesa para ser trinchado allí, delante de todos los comensales.
Consejos de preparación
Acompañamientos del pavo
El pavo es un plato relleno es un plato muy completo pero raramente se presenta en solitario. Cuando el relleno consiste en carne, como este caso, se suele acompañar de una selección de verduras cocidas al vapor o de un puré. El de patata es el básico, pero también se puede apostar por uno de batata.
El pavo es en sí un plato bastante fuerte, quizás por eso las salsas con las que se suele combinar son aquellas que tienen la fruta como protagonista. De frambuesa, de naranja o de melocotón, todas ellas con un toque dulce, son las que más se utilizan.